Olga Ramos, Corresponsal
GÓMEZ PALACIO, DGO.- En el marco de la conmemoración del Día Nacional de Protección Civil, en esta ciudad no se realizaron simulacros como en casi todo el territorio nacional, con motivo de frenar contagios por Covid-19.
En este día se recuerda a las personas que fallecieron en el sismo de 1985, toda vez que a partir de esta tragedia se establece la creación de un instrumento administrativo de cobertura nacional que permite integrar y coordinar la respuesta de todo los sectores sociales en caso de presentarse un nuevo desastre natural.
De esta forma el 6 de mayo del año 2000, fue publicado en el Diario Oficial de la Federación la Ley General de Protección Civil con la intervención de estados y municipios. Poniéndose en marcha un sistema de protección civil reactivo y preventivo, con la participación de la iniciativa privada y los tres órdenes de gobierno.
Esto obligó asimismo a despertar la conciencia individual y colectiva de auto preparación y auto protección, para enfrentar con responsabilidad y conocimiento cualquier desastre natural que pudiera presentarse.
Desde que se constituyó el Día Nacional de Protección Civil, en el municipio de Gómez Palacio, cada año en esta fecha se venían realizando simulacros de sismo aún y cuando en esta región éstos no se presentan, además de ofrecer pláticas en escuelas e industrias.
Cabe destacar, que este municipio ha alcanzado la certificación por pare de la Secretaría de Gobernación y el Centro Nacional para la Prevención de Desastres Naturales; además de que Gómez Palacio, cuenta con un Plan de Contingencia que le permite brindar atención inmediata a la población antes, durante y después de cualquier contingencia que llegara a presentarse.
El área de Protección Civil está obligado a dar ayuda en caso de desastres naturales como: tsunamis, lluvias torrenciales, sabotaje, epidemias, incendios forestales y urbanos, granizadas, accidentes terrestres, aéreos, marítimos, fluviales, envenenamientos, tormentas eléctricas, lluvias torrenciales, sabotaje, epidemias, terrorismo, radiaciones, sequías, vulcanismo, explosiones, concentraciones masivas de población, contaminación de agua, suelo y aire, entre otros.