Juan Carlos Chávez
Desde una temprana edad, Gerardo Castañeda Alvarado “La Chata” se sintió atraído por el deporte, a sus hermanos mayores les gustaba leer la sección deportiva del Heraldo de México, y el hacía lo mismo una vez que dejaban este periódico, integrante de la familia del reconocido y añejo Radiadores Libertad, el que por cierto sigue en funciones hasta esta fecha, pero ahora ubicado en la calle Alberto Terrones Benítez.
De los tres, él fue quien se inclinó por el futbol, ya que Víctor y Sergio -los mayores- se dedicaron al basquetbol, empezó a jugar desde la escuela primaria, la cual cursó en la escuela primaria número 20, Miguel Hidalgo, su posición fue defensa central, posteriormente ingresó a la escuela Técnica número uno, en donde ya jugó de manera más formal, en donde casi de inmediato se lo llevaron de gira a Mexicali, representando orgullosamente a Durango a sus escasos 12 años de edad, en este tiempo guiado por el profesor Jonathan Vega, quien también se desempeñaba como árbitro, y por Heber Mercado Rentería, quien le enseñó las bases del juego y de manera incipiente, de dirección técnica.
Al terminar su instrucción secundaria, ingresa a la preparatoria nocturna, y con ello empezó a entrenar con la selección de la Universidad Juárez del Estado de Durango, así como en la original Liga Obrero Estudiantil, creada por un Sueco que llegó a la UJED, y mantuvo un excelente nivel por varios años, Gerardo Castañeda empezó a participar en los torneos regionales estudiantiles por toda la República, siempre con buenos resultados, preseleccionado nacional, integrante del equipo representativo de la Universidad Autónoma de México, con quien participó en una gira a Venezuela que le valió ser el deportista del año en 1980.
“La Chata” recuerda que en una de las pruebas con la selección amateur sufrió un desgarre en uno de sus muslos por el exceso de trabajo, en ese momento se terminó su alto rendimiento, ya que duró cinco años sin jugar en el nivel acostumbrado, por lo que ya no hubo llamados para él, ante esto, y para continuar con su pasión por el futbol, empezó a dirigir, si bien ya lo había hecho con el equipo de Radiadores Libertad, ahora lo hizo con una selección de la universidad, aunque de manera totalmente lírica, no obstante siempre prevalecieron los buenos resultados, después de trabajar siete años en la Secretaría de Hacienda, y a pesar de tener una base federal, presentó su renuncia, y gracias a las relaciones que había hecho, fundó la que llama “Escuelita de los Pumas” , filial de la UNAM en Durango, otorgada a la Universidad Juárez del Estado de Durango, en donde participaron varios de sus compañeros, sistema que le dejó grandes satisfacciones por la oportunidad que dio a varios jugadores de concluir su carrera en la UJED por las facilidades que les otorgaban por representar a esta universidad.
Después de concluir con este programa, Gerardo Castañeda se dedicó a capacitarse, obtuvo su título como entrenador profesional, tuvo la oportunidad de cursar un Master Internacional de Negocios y Administración del Instituto Johan Cruyff, un año viajando de ida y vuelta casi el mismo día por un año a la ciudad de México, posteriormente, gracias a una amiga de su familia recibió un curso para sesiones de entrenamiento exitosas para niños, a cargo de entrenadores de la Premier Ligue, con licencia UEFA, lo cual, después de quedar entre seis seleccionados de un grupo de 80, obtuvo su grado como formador clase uno de la Premier Ligue de Inglaterra, a través de un colegio de la embajada del Reino Unido en México, cabe destacar que solo hay seis formadores en este país y uno de ellos es Gerardo Castañeda Alvarado, por ello, el periódico Victoria de Durango rinde un homenaje a la destacada trayectoria de este destacado duranguense.