“Necesario que aprendamos a convivir en familia, que aprendamos a estar en nuestras casas” dijo el Padre Noé Soto, vocero de la Arquidiócesis de Durango, ante el llamado de quedarse en casa para evitar contagios del Covid-19.
Señaló es importante que se guarden y respeten roles y horarios, poner disciplina en las casas per también que se dé la sana convivencia, aseguró que es tiempo para que se den cita los valores humanos, que se pueda tener una sana convivencia a través del juego, de las charlas, del estudio, de la lectura y de la oración.
Recordó que dentro de la Iglesia se tiene un adagio que dice “familia que reza unida, permanece unida”, por lo que mencionó que si la oración se utiliza ahora dentro de las familias de manera especial habrá más paz y tranquilidad en los hogares.
“Necesitamos ser garantes de la paz familiar, y por eso invitamos a que la convivencia se haga desde el respeto, desde los valores, desde la disciplina pero también de la oración”.