La aglomeración causado por la presencia del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, en una playa del litoral de Sao Paulo, generó polémica así como voces de rechazo en las redes sociales por la actitud del funcionario público.
Bolsonaro, quien se encuentra con su familia descansando unos días en la base militar del litoral del estado de Sao Paulo, paseaba al final de la tarde del viernes en una lancha en Praia Grande y, cuando la embarcación se aproximó a los bañistas, el mandatario decidió en lanzarse al agua y nadar y unirse a ellos.
Por lo que la presencia del jefe de Estado y sus acompañantes, quienes no llevaban cubrebocas para evitar la propagación del Covid-19, provocó una aglomeración de personas, que rodearon al gobernante.
El acto de Bolsonaro fue criticado por el gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, quien expresó que al presidente de Brasil “le gusta el olor de la muerte”, al no dar un ejemplo positivo a los brasileños para prevenir los contagios del SARS-CoV-2.