Rusia clasificó oficialmente a Meta, como una organización “terrorista y extremista”, lo que allana el camino para la apertura de problemas judiciales para sus usuarios.
En marzo, un tribunal ruso había declarado “extremista” a Meta y sus dos principales redes sociales, Instagram y Facebook, bloqueadas en Rusia.
El 10 de marzo Meta anunció que las plataformas podrían permitir publicaciones que incluyeran mensajes como “muerte a los invasores rusos” pero no que contengan amenazas creíbles contra civiles,
Desde marzo, los internautas no pueden acceder a Instagram ni Facebook desde Rusia, por lo que muchos en ese país utilizan redes privadas virtuales para entrar en las redes sociales.
La decisión del organismo ruso coloca a la empresa estadounidense al mismo nivel que grupos de extrema derecha nacionalistas, organizaciones terroristas extranjeras y grupos opositores de Rusia.