De nueva cuenta, México no reportó avances en equidad salarial, pensión e igualdad parental, según el Banco Mundial (BM).
Así lo refleja el indicador WLB, al destacar que México obtuvo 88.8 puntos en una escala de uno al 100, es decir la misma calificación de los dos últimos años.
Lo anterior significa que las mujeres mexicanas, en promedio, disfrutan 88.8% de los derechos que tienen los hombres.
Bélgica, Canadá, Francia, Grecia, Portugal y España destacan con la más alta puntuación, con 100, y entre los países con menor puntuación están Sudán, Qatar y Yemen, debajo de 30 puntos.
En el reporte La mujer, empresa y el derecho 2023 que dio a conocer este jueves el organismo que dirige David Malpass, México está arriba del promedio mundial.
En 2022, el puntaje promedio global en el índice Mujeres, Negocios y el Derecho del Banco Mundial subió medio punto, a 77.1.
Al ritmo actual de reformas, en muchos países una mujer que ingresa a la fuerza laboral se jubilará antes de obtener los mismos derechos que hombres, señala.
Mujeres, Empresas y el Derecho 2023 evalúa las leyes y reglamentos de 190 países en ocho áreas relacionadas con la participación económica femenina: movilidad, lugar de trabajo, salario, matrimonio, paternidad, emprendimiento, activos y pensiones.
Los datos, que están actualizados al 1 de octubre de 2022, ofrecen puntos de referencia objetivos y mensurables para el progreso global hacia la igualdad legal de género.
A la fecha, sólo 14 naciones, todas economías de altos ingresos, tienen leyes que otorgan a las mujeres los mismos derechos que a los hombres, refiere.
En todo el mundo, casi 2 mil 400 millones de mujeres en edad de trabajar aún no tienen los mismos derechos que los hombres, y cerrar la brecha laboral de género podría aumentar el PIB per cápita a largo plazo en casi 20% en promedio en todos los países, estima en el documento.
Los estudios proyectan ganancias económicas globales de 5 a 6 billones de dólares si las mujeres iniciaran y escalaran nuevos negocios al mismo ritmo que los hombres. En 2022 se registraron sólo 34 reformas legales relacionadas con el género en 18 países, la cifra más baja desde 2001.
