Por: Óscar Luna.
En mi transitar por la bella Ciudad de México, en la calle de la Palma me encontré un bello edificio de estilo afrancesado que me recordó mucho a unas grandes joyas arquitectónicas que tenemos en la ciudad de Durango, realizadas por un arquitecto de origen europeo que se caracterizan por su majestuosidad y belleza, siendo uno de los principales edificios de Durango, por ello en esta ocasión les hablaré de las obras arquitectónicas del ingeniero Estanislao Slonecky.
Ya hemos mencionado el tema de migración que se dio en Durango durante el siglo XIX. A nuestra ciudad llegaron Alemanes, Americanos, Libaneses, Chinos entre muchas nacionalidades para establecerse de manera tanto temporal cómo definitiva, veían una gran oportunidad laboral en Durango ya que su tecnología y conocimientos aprendidos en su país era una novedad para nosotros por lo que el mercado de oportunidades era mayor.
Se desconoce con exactitud la nacionalidad del ingeniero Estanislao, algunos mencionan la posibilidad de que era Prusiano, otros dicen que era Polaco pero para no entrar en debate de su nacionalidad, dejemos en qué era de origen Europeo. Llego a la ciudad de Durango hacia el año de 1897, cuando fue llamado por Pedro Escárzaga aquel rico minero, político y comerciante de la ciudad, lo mando traer para que diseñara y construyera su nueva residencia ubicada en la esquina sureste de calle 20 de noviembre y calle Victoria.
Para el año de 1898 se comienza la construcción de esta casa, más tarde llamado palacio por sus dimensiones y belleza. Con un estilo afrancesado, lleno de detalles ornamentales labrados en piedra y rematado por su buhardilla con recubrimiento en tejas metálicas y el palomar, elementos característicos en las obras arquitectónicas que Slonecky llevo a cabo en Durango.
Es importante mencionar que algunos elementos antes mencionados del Palacio de Escárzaga ya no se encuentran, cómo su buhardilla y palomar, ya que en el año de 1917 sufrió un gran cambio por la ampliación que se le dio a la calle 20 de noviembre, teniendo que cortar este palacio más de 4 metros y con esta modificación sufrió la eliminación de estos elementos construidos por Estanislao.
A la par que construía el palacio de Escárzaga comenzó a llamar mucho la atención de los personajes de abolengo en la ciudad y fue contratado para elaborar dos proyectos arquitectónicos más, uno de ellos fue para construir la casa de Francisco Gómez Palacio, hijo del eminente ex gobernador de Durango que llevaba su mismo nombre. Esta casa se construyó en la esquina suroeste de la calle Victoria y calle Aquiles Serdán, una casa que es muy interesante porque hasta la fecha su exterior luce intacto a cuando fue construida con ese estilo afrancesado, ornamentación en cantera y su palomar en el remate, un elemento característico de Estanislao.
Guillermo Drunnert de descendencia alemana, maravillado de las dos obras que Estanislao construía decide comisionarle la tarea que le construya un gran edificio en todo el solar que décadas anteriores había albergado el seminario chico en la calle 5 de febrero entre calle Constitución y calle Bruno Martínez, (donde hoy en día está Plaza Fundadores). De esta manera comienza a la par de las otras dos construcciones este gran edificio que más tarde va a adquirir una gran popularidad entre la sociedad de Durango y todos lo van a llamar cómo el Palomar.
Lamentablemente este edificio en el año de 1956 se incendió, ocasionando una pérdida total de él, siendo derribado lo poco que quedó y durante muchos años estuvo el solar vacío, hasta qué décadas después comienza la construcción de un edificio contemporáneo a la época, que albergó por muchos años una tienda departamental, hasta el año de 2012, cuando fue derribado para construir lo que hoy es la Plaza Fundadores, quedando solo el recuerdo de lo que fue el eminente Palomar.
En algunos documentos que he tenido la oportunidad de leer, describen la actitud de Estanislao como alguien estricto y de temperamento frágil, pero quizá estás actitudes eran la que lo forjaban como alguien disciplinado e inteligente para su trabajo, porque debemos mencionar que su trabajo fue de gran calidad, destacó por sus conocimientos arquitectónicos, mostrados en estas grandes obras antes mencionadas.
Lamentablemente como ya lo mencioné una de estas obras de Slonecky ya no está en pie, una más luce pero con algunas modificaciones, siendo solo la casa de Gómez Palacio, hoy llamado Museo del Aguacate, la que luce imponente y original a su construcción. Hoy en esta sección recordamos al gran Estanislao, aquel arquitecto europeo que llegó a Durango sin imaginar que su legado pasaría a la historia de esta ciudad.
La próxima vez que transiten por estos edificios, admiren su arquitectura con detalle y comparen un edificio del otro y con ello generen una opinión del trabajo del ingeniero Estanislao Slonecky.